Nobleza, poderío, bravura, todo toro pasa por la espada valerosa del torero, mano de ojos firmes, alma de corazón ciego, humanidad muerta, macho hecho de mierda y pelo. De las pocas luces que le quedan, todas las viste su traje. De la ilusión cómplice de los aplausos se oculta sombría la sangre, vapóreo hierro de oxidado linaje:
Gladiador, sí.
Matador, sí.
Y por lo tanto asesino.
Que si esto es cultura, permitidme entonces ser inculto, que si esto es honor, dejadme ser innoble, y más aún, me niego a ser artista en esta tierra mientras se ensalce la figura del torero y se considere el toreo arte.
¡Qué corra la sangre! Por las venas, que lo contrario es derroche.
¡Qué corra el toro! Libre en la dehesa, que lo contrario es cruel divertimento.
PD: Iniciativa popular antitaurina 2014 -> https://www.facebook.com/PANyTOROS.es